24 años, Licenciada en Psicología. 

¡Hola! Me hace muy feliz tener este espacio en el que puedo contarles un poco sobre mi.

Crecí en un pueblo muy bonito rodeada de personas amigables. Mi pasión por ayudar a las personas nació cuando yo era pequeña y acompañaba a mis padres en su trabajo como miembros en pro de los derechos humanos. 

Me hace muy feliz cuidar y proteger a los más pequeños; cuando tenía 12 años decidí entrar de voluntaria en un Centro Cultural Comunitario en mi comunidad, en el que ayudaba a los pequeños con actividades escolares y extracurriculares, hacíamos manualidades y dinámicas, amé realizar esas actividades con los niños, verlos divertirse me llenaba de alegría, desde entonces descubrí mi pasión por la educación y el desarrollo de los niños, para mi siempre ha sido muy importante crear estrategias que ayuden a los niños a crecer seguros, valientes, felices, muchas veces en mi trabajo como voluntaria me enfrente a grandes retos pues algunos niños mostraban dificultad para integrarse en actividades, miedo que en la mayoría de los casos venía de no sentirse capaces de terminar con éxito la actividad. 

Motivarlos a soltar ese miedo se volvió uno de mis objetivos principales, con las herramientas que tenía a mi corta edad logré crear un cambio significativo en la vida de los niños, pues hoy después de tantos años ellos me ven y me recuerdan con cariño. Lo que hacía para ayudarlos con el miedo era acompañarlos en su actividad, recordarles que era un proceso y podríamos volverlo divertido, sin importar las veces que pudiéramos fallar, porque podríamos volverlo a intentar.

Soy empática y servicial con las personas, responsable, paciente, atenta, honesta, cuidadosa, alegre, tengo la capacidad de adaptarme con facilidad a las necesidades de cada niño y considero de suma importancia crear un vínculo de confianza y respeto con ellos para hacerlos sentir seguros y formar una bonita amistad.

De pequeña tuve curiosidad por el comportamiento de las personas, observaba cuando un niño estaba triste o se sentía desplazado por otros niños y eso me ponía muy triste, pensaba en que nadie debería sentirse así cuando es pequeño, así que me acercaba a platicar con ellos e invitarlos a jugar, siempre tenía ideas de diferentes juegos en los que pudiéramos divertirnos.

Ahora que soy mayor siempre intento ayudar de la misma forma, esta vez con mejores herramientas que cuando era pequeña. “Se el adulto que necesitabas cuando eras niño” esta frase la llevo grabada en mi memoria porque me recuerda lo importante que es para un niño sentirse escuchado, querido y protegido, poder contar con un adulto amable que pueda ayudarle a encontrar las herramientas para vivir más feliz, sentirse mas seguros de si mismos y acompañados en cada etapa.

Me gusta prepararme día con día para dar un mejor servicio, me emociona mucho descubrir cosas nuevas con los más pequeños. Una de mis cosas favoritas es la exploración, cuando tengo la oportunidad de estar con los pequeños siempre busco motivar en ellos esa capacidad que tenemos todos de explorar, la curiosidad es tan natural y tener la oportunidad de ver sus caras de asombro por cosas que desconocían del mundo es un regalo increíble y con ello contribuir a que encuentren su pasión por el arte, el deporte, la ciencia, la lectura, la naturaleza, el baile, etc.

El cuidar de los pequeños ha sido desde siempre una de las cosas que más me apasiona, he aprendido tanto de ellos y he tenido la oportunidad de enseñarles tantas cosas como es posible para acompañarlos en su descubrimiento del mundo e impulsarlos en cada etapa de su infancia. Siento una gran satisfacción cuando termino un servicio de nanny y los pequeños me abrazan y preguntan “¿cuándo vas a volver?”, con ello descubro que logre crear un vínculo sincero con ellos.

Artículos de Liliana Montaño en el Blog de Nanny Heart:

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